Quizá en más de una ocasión te has hecho la siguiente pregunta ¿cuál es el tamaño ideal de mesa que debo utilizar? En realidad esa es una pregunta un tanto compleja, ya que lo que influye no es el tamaño, sino el acomodo de los dulces.
Recuerda que una mesa de dulces aporta 2 importantes cosas a tu evento, es vistosa, así que forma parte de la ambientación y por supuesto, la oportunidad de degustar bocadillos y golosinas hace que los invitados se sientan felices y convivan, lo cual brinda un ambiente especial a tu fiesta.
Como mencionábamos anteriormente, lo que realmente importa no es el tamaño de la mesa, sino el acomodo de los dulces. Por ejemplo si tienes una mesa pequeña y muchos invitados, puedes hacer uso de las fuentes o de las escaleritas y todas esas tarimitas o desniveles que te ayudan a acomodar los dulces sin que luzca “amontonado”. Recuerda que puedes valerte de utensilios, refractarios u otros objetos que tengas en casa para causar esos desniveles.
Si por el contrario la mesa es muy grande, debes evitar que se vea vacía, pero no intentes rellenar espacios con bocadillos de más. En estos casos podemos cubrir espacios con adornos, por ejemplo con flores grandes o cualquier cosa que valla acorde al tema de tu evento.
Recuerda que el ser la “Anfitriona”, no significa que lo hagas todo solo, puedes recurrir a alguna amiga o un familiar para que te ayude a montar la mesa de dulces. Toma en cuenta que no es necesario colocar todos los dulces en la mesa desde el principio, puedes rellenar conforme veas que comienzan a terminarse.