Algunas personas cometen el grave error de mentir al pastelero sobre la cantidad de invitados, con la esperanza de que al tener un pastel más grande, no será necesario gastar mucho en golosinas para la mesa de dulces, sin embargo recuerda que el pastel es lo último que los invitado prueban y por más grande que éste sea no comerán más de una rebanada o más de un cupcake. Y te sentirás pésimo al ver que los dulces se han terminado y algunos o la mayoría de tus invitados no han tenido ni oportunidad de probarlos. Así que recuerda que siempre debe haber suficiente para todos.
Toma en cuenta que no puedes basar las cantidades de postres o golosinas conforme a tu presupuesto, las cantidades siempre serán las mismas por invitado. Si tu presupuesto es algo limitado, es preferible que los cambios los realices conforme a los dulces que ofrecerás, es decir, siempre hay golosinas más económicas que otras, elige de entre las más económicas pero nunca reduzcas la cantidad de dulces por invitado.
La ubicación de la mesa de dulces
Otro de los puntos sumamente importantes para que la mesa de dulces se luzca y sea accesible en tu evento.
Recuerda que ubicar la mesa de dulces cerca de las puertas, ya sea la de entrada o salida, o bien alejada de donde se encuentran los invitados, ocasionará que su acceso sea difícil y en algunos causará algo de pereza tener que trasladarse hasta donde se encuentre la mesa para tomar unos bocadillos, por lo tanto tus invitados comerán menos.
En cambio si la mesa la sitúas en un área más centrada o cerca de los invitados, les permitirás tener un fácil acceso y se sentirán más atraídos por visitar la mesa de dulces. Por otra parte recuerda que la mesa forma parte de la ambientación y debe estar disponible en todo momento.